Siempre se habla de los beneficios del ejercicio físico en la tercera edad. Te invitan a hacer yoga, correr o natación, pero poco se habla del ajedrez. En mi opinión creo que este deporte/juego es lo más beneficioso para cuando se llega a estas edades. Yo comencé a saberlo cuando inscribí a mi madre en Erit, una residencia geriátrica en Barcelona, donde lo incluyen como una de las actividades dentro de su amplio programa.
Hay un estudio de la Universidad de Valencia, donde se ha demostrado cómo la práctica de este juego interviene en la prevención del Alzheimer, esa maldita enfermedad para la que todavía no hay cura. Incluso más que otros juegos memorísticos presentes en el mercado. La enfermedad de Alzheimer es sin lugar a dudas una de las manifestaciones de demencia senil más común y viene asociada a la pérdida lenta y progresiva de las células nerviosas.
Datos del estudio
Según este estudio se seleccionaron a 120 personas con edades entre 55 y 87 años, si bien el 75 por ciento de ellos tenía entre 65 y 79 años. Se dividió a estas personas en dos grupos de 60 participantes. Uno de los grupos, casi todos ellos neófitos en ajedrez, recibió clases de este juego una hora y media a la semana durante un año. El otro asistió a otros cursos, pero no al de ajedrez, durante el mismo tiempo. A ambos se les realizaron pruebas psicotécnicas antes, durante y después de los cursos, siendo los resultados obtenidos al final del estudio muy elocuentes.
- Combate la depresión. Las personas mayores mantienen su mente ocupada y aumentan la capacidad de concentración y de tomar decisiones ante los problemas de cada día quitándoles preocupaciones que podrían acabar en depresión. Mi madre tuvo un amago de depresión y por fortuna acabó saliendo.
- Previene enfermedades. El ajedrez retrasa el envejecimiento cerebral, está demostrado. Durante la Olimpiada Mundial de Estambul 2012, el gran periodista Leontxo García explico el estudio que realiza desde hace años para probar que la práctica del ajedrez puede ser un método de prevención de enfermedades como el Alzheimer o la demencia senil.
- Combate la soledad. Es uno de los grandes males de nuestros mayores. Son personas que comparten la misma afición hace más difícil que las mismas sientan la soledad que inevitablemente las acompaña en esta etapa de la vida.
- Ejercicio físico. Aunque no estamos hablando de yoga o de natación, los constantes movimientos de las manos para mover las piezas, así como los brincos de exaltación ante una buena o mala jugada mantienen a la persona fuerte físicamente y evita la rigidez en los músculos que presentan la mayoría de las personas de avanzada edad.
Pero el ajedrez no sólo ayuda a que nuestros ancianos se entretengan, además les permite demostrar que pueden realizar labores que hace años en nuestra sociedad parecerían inaccesibles para ellos. Además, hay que tener en cuenta que entre un grupo de ajedrecista existe el humor, la amistad y el ambiente familiar porque el ajedrez es precisamente eso, una familia. Me alegró de haber llevado a mi madre a este lugar, porque aunque es una decisión dura, he comprobado cómo ha mejorado.