El deporte es tan importante para nosotros que debería de ser practicado por el 100% de la población. No tan solo por temas estéticos y de autoestima, sino por temas tan básicos e imprescindibles como el “mantener una buena salud”.
Con esto no quiero decir que practicar deporte vaya a librarte de ponerte enfermo, pero sí que va a ayudarnos a que seamos menos propensos a sufrir ciertas enfermedades -como problemas cardiopulmonares, por ejemplo-.
¿Por qué el deporte es fundamental?
A pesar de que se ha demostrado que practicar deporte ayuda a que nuestro cuerpo padezca menos enfermedades, tan solo el 59,6% de los españoles han practicado deporte este último año. Teniendo en cuenta los beneficios de cualquier actividad física, es una cantidad irrisoria para lo que debería ser.
No es exagerado decir que el deporte puede salvar vidas, y es que el simple hecho de saber cómo las enfermedades pueden afectarnos menos, debería de hacernos abrir los ojos y, al menos, salir a caminar aunque fuese media hora o una hora al día.
Beneficios del deporte
- Mejora tu capacidad cardiopulmonar. Porque los músculos necesitan oxígeno, por lo que los pulmones y el corazón van a trabajar a tope para que tengas lo que necesitas mientras practicas deporte. Esto quiere decir que estos órganos van a tener mayor capacidad y van a trabajar mucho mejor que cualquier otra persona que no practica ejercicio físico, por lo que las enfermedades derivadas de estos órganos van a tener menos posibilidades de afectarles.
- Mejora tu movimiento. El deporte se practica con todo tu cuerpo, músculos, tendones y esqueleto incluidos. Esto quiere decir que toda tu formación muscular y ósea va a fortalecerse para recibir los impactos que cualquier ejercicio físico pueda provocar en ellos. Por lo tanto, enfermedades como la artritis, las tendinitis… van a ser mucho menos probables en una persona asidua al deporte.
- Mejora tu energía durante el día. Cada uno elige si practicar deporte durante la mañana, el día o la tarde, porque cada cuerpo es diferente. Mi pareja siente más energía por la noche. Yo, en cambio, prefiero hacerlo por la mañana. Lo que sí está demostrado es que una persona que practica deporte con regularidad nota que su cuerpo se llena de energía, que es menos propensa a cansarse y a necesitar estar sentado todo el día. Esto pasa porque, desde el inicio de la historia, el ser humano ha sido nómada y se acostumbra muy rápidamente al movimiento. De hecho, bastante 21 días solamente para que nos acostumbremos a una nueva rutina. Si practicas deporte con regularidad, vas a notar que tu propio cuerpo empieza a pedirte realizar otras actividades muy diferentes al sedentarismo que van a impedirte estarte quiero en el sofá.
- Por supuesto, mejora la autoestima. Porque a todos nos gusta mirarnos al espejo y sentirnos a gusto con nuestro reflejo. Pero recuerda esto: estar delgado o no, estar fuerte o no, no debe influir, en absoluto, en nuestra autoestima. TODOS somos perfectos tal y como somos, y el deporte no debe ser un salvavidas para tu autoestima. Eso es algo que debes trabajar por tu cuenta. A pesar de todo esto, sí, sin duda influye en la forma en la que nos vemos a nosotros mismos a diario. Y esto mejora la autoestima.
Créate una rutina
Vivimos en la época de las prisas: niños, labores del hogar, trabajo… Entre la pereza adolescente y la falta de tiempo, buscar un hueco para practicar deporte es, cada vez, más difícil. Y luchar contra esto es agotador, ¿verdad?
Aun así, te vamos a aconsejar que lo busques. Aunque sea media hora, se ha demostrado que practicar deporte un mínimo de tres veces por semana ayuda al correcto funcionamiento del cuerpo y nos ayuda a mejorar como personas. No tengas miedo de dejar un poco de tu hora de descanso para actividades físicas, porque con el tiempo vas a comprobar por ti mismo que es lo mejor que has hecho este año.
Somos conscientes de que tenemos tantas cosas de hacer que es realmente difícil encontrar ese hueco, esa simple media hora en la que nos conviene movernos y reactivar nuestro cuerpo. Pero búscala, te aseguro que, con el tiempo, tú y tu cuerpo lo vais a agradecer.
No tienes por qué hacer grandes cosas. No tienes por qué levantar peso, correr cinco kilómetros o ese tipo de ejercicios que, ¡la verdad sea dicha!, todos nos agotamos nada más de escucharlas. Lo más idóneo para ti es que empieces por cosas sutiles: cuando vayas a comprar el pan, aumenta la caminata diez o quince minutos; cuando quedes con las amigas a pasear, iros a una ruta de senderismo que haya cerca de la ciudad, con unos bocatas y los nenes; cuando vayas con tus hijos al parque, juega con ellos a lo que a ellos les haga ilusión. Es muy fácil reactivar tu vida sin tener que ir al gimnasio, solo debes reinventarte y recordar que tú y tu cuerpo sois uno, ¡y que ambos sois muy importantes!
Practicar deporte de forma adecuada
Ten presente esto: no todo vale para practicar deporte.
Me explico: ¿tú irías a bañarte a la playa con vaqueros? Poder se puede, SIN DUDA, pero no vas a estar en absoluto cómodo cuando salgas empapado del agua.
Lo mismo pasa con el deporte, pero a un nivel más saludable y necesario. El cuerpo precisa de una movilidad natural para que el deporte sea un beneficio, y no darle de esa movilidad puede ser contraproducente para nosotros.
Hablamos de los complementos, por supuesto: chándales, camisetas, deportivas… No es en absoluto conveniente salir a correr una carrera de obstáculos en vaqueros, al igual que no es conveniente salir a correr en sandalias. Pueden salirte cebaduras, puedes tener mucha menos movilidad y lesionarte… Son tantos los inconvenientes de no llevar un vestuario adecuado para el deporte que, antes de empezar a practicar nada, deberías de mirar en páginas como Compra Deporte para asegurarte de llevar el equipo adecuado. Tu salud y bienestar es lo primero, nunca lo olvides.